

Fueron rescatados junto a su mami y sus hermanitos, tenían tanta hambre que Piraña, mordió el dedo de mi compañera al darle de comer, de ahí le viene su nombre...
Gracias a Sonia, que es una buenísima persona y se ofreció para acogerlos a todos, pudieron salir adelante estos pequeños.
Estos son en la actualidad Piraña y Driu, tienen cara de felicidad absoluta!!!



Gracias Amparo y Guti por darles un hogar!!!!